Tras culminar hoy su jornada de nueve días de ayuno y oración por el rescate de los valores éticos, morales y espirituales, la mayoría de los manifestantes se mantuvieron en silencio durante la caminata. Algunos portaban pancartas alusivas a sus reclamos.
Previo a su salida, a la que se unieron otras organizaciones, los religiosos realizaron una oración que fue repetida en el Panteón Nacional.
Rafael Guillén, coordinador de Paz Dominicana, dijo sentirse complacido con la jornada de ayuno y oración, ya que recibió el apoyo de muchos dominicanos, que al igual que ellos, entienden que el país debe cambiar de rumbo.
"Es un ejemplo ver como jóvenes realizan protestas sin tirar piedras, quemar gomas y tirar tiros, es una forma muy civilizada de hacer sus reclamos; muchas organizaciones deben imitarlos", sostuvo Virgilio Almánzar quien lo apoyó en la marcha.
Durante el recorrido, personas ajenas a la marcha, le saludaban en señal de apoyo.
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